Consolidar el Pacto Histórico como un proyecto político electoral de izquierdas a nivel nacional implica, necesariamente, fusionar los 13 Partidos que lo integran en la actualidad en un Partido Único. Veamos.
El artículo 262 de la Constitución Política establece que “los partidos y movimientos políticos con personería jurídica que sumados hayan obtenido una votación de hasta el quince por ciento (15%) de los votos válidos de la respectiva circunscripción, podrán presentar lista de candidatos en coalición para corporaciones públicas”. Esa votación fue ampliamente superada por el Pacto en las elecciones de 2022, por lo que es jurídicamente imposible repetir la fórmula de la Coalición. En consecuencia, para las próximas elecciones hay 2 posibilidades: o lanzar 13 listas con los Partidos que integran el Pacto, dividir la fuerza y competir entre sí, o fusionar todas las fuerzas en un Partido Único. No hay que ser muy perspicaz para comprender que la única alternativa viable es la segunda.
Elegir el primer camino implicaría impajaritablemente reducir en forma estrepitosa la representación política y, en todo caso, pondría en gravísimo riesgo las personerías jurídicas de cada uno de los Partidos, incluidos los más grandes.
En efecto, el artículo 108 de la Constitución establece en lo pertinente que: “El Consejo Nacional Electoral reconocerá Personería Jurídica a los partidos, movimientos políticos y grupos significativos de ciudadanos. Estos podrán obtenerlas con votación no inferior al tres por ciento (3%) de los votos emitidos válidamente en el territorio nacional en elecciones de Cámara de Representantes o Senado. Las perderán si no consiguen ese porcentaje en las elecciones de las mismas Corporaciones Públicas”.
Entonces, por ejemplo, si para las elecciones al Congreso de 2026 votaran 20 millones de personas, que es un cálculo realista, únicamente obtendrían curul los Partidos que lleguen a 600mil votos. Yendo separados ninguno de los Partidos que actualmente está coaligado en el Pacto puede dar por sentado que alcanzará esa votación. En las anteriores elecciones, el Partido Fuerza Ciudadana no alcanzó el umbral y, pese a obtener casi 440mil votos, se quemó. Igualmente sucedió con el Partido Estamos Listas, que obtuvo casi 110 mil votos. Con esas mismas votaciones, en la lista de la Coalición del Pacto Histórico en 2022, se hubieran ganado varias curules más.
La unidad de las izquierdas es un imperativo ético y político, en cualquier tiempo y lugar. Para el contexto concreto colombiano actual es también, y, sobre todo, una necesidad incontrovertible ante una realidad jurídica irrefutable. Tomar esta decisión de sentido común debería darse cuanto antes.
Espere próximamente la segunda entrega de esta columna…
